Garantizar el acceso a la justicia para las mujeres trans y trabajadoras sexuales

Pronunciamiento 001

Ciudad de México a, 16 de enero de 2025

En el marco del tercer aniversario de la tentativa de transfeminicidio contra Natalia Lane, asambleísta del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED), expresamos nuestra profunda preocupación ante la falta de acceso pleno a la justicia que enfrenta esta mujer trans y trabajadora sexual, sobre todo en lo que respecta a la agresión y revicitimización que vive de parte de grupos que se ostentan como defensores de Alejandro “N”, imputado en este caso.

En la Ciudad de México, hemos avanzado en la promoción de derechos y el fortalecimiento de un marco normativo que respalda a los grupos de atención prioritaria, particularmente a las personas trans. Ejemplo de ello son las reformas legales para el reconocimiento de la identidad de género, la tipificación del delito de transfeminicidio, la existencia de una Fiscalía Especializada y la implementación de políticas públicas que buscan erradicar la discriminación estructural. Sin embargo, pese a los avances, el proceso legal en este caso no ha logrado garantizar los derechos de la víctima. Resulta esencial que todas las instancias responsables fortalezcamos nuestros esfuerzos para erradicar las barreras que enfrentan las mujeres trans y trabajadoras sexuales en su acceso a la justicia y asegurar que las decisiones judiciales consideren plenamente las condiciones de vulnerabilidad y los riesgos que enfrentan.

Es fundamental que las instituciones de justicia trabajen con enfoque de género y no discriminación, conscientes del impacto que los prejuicios y estigmas sociales tienen en la atención de los casos de violencia contra todas las mujeres. Además, las narrativas que colocan a la trabajadoras sexuales como responsables de las violencias que enfrentan, especialmente en el contexto del trabajo sexual, deben ser erradicadas.

Es urgente tomar consciencia de la necesidad de visibilizar todos los casos de violencia transfeminicida, pues su acceso a la justicia no debe ponderarse atendiendo a su trayectoria y notoriedad pública, sino que debe hacerse un llamado urgente para robustecer la respuesta institucional y garantizar procesos más ágiles, transparentes y respetuosos de los derechos humanos. En este sentido se señala también el caso de Vanessa, mujer trans, conductora de un auto de plataforma digital asesinada, pues estos casos deben alertarnos sobre la situación de las mujeres trans menos visibles, aquellas que, por su contexto de exclusión, violencias y marginalidad, enfrentan barreras adicionales para acceder a la protección y a los servicios de justicia.

La violencia feminicida contra las mujeres trans es una de las manifestaciones más extremas de la discriminación que enfrentan. Este tipo de actos atenta contra la dignidad humana y los derechos fundamentales de quienes contribuyen activamente a la construcción de una sociedad más justa e incluyente.

La Ciudad de México debe continuar como referente en la protección de los derechos humanos y el combate a la discriminación, demostrando que no hay espacio para la impunidad en una sociedad que aspira a ser verdaderamente incluyente.

Desde nuestras instituciones, reafirmamos nuestro compromiso con la construcción de políticas públicas e iniciativas que permitan proteger a todas las mujeres trans, combatiendo la exclusión estructural y promoviendo entornos de seguridad y dignidad para todas las personas, sin importar su identidad de género, ocupación o situación económica.

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